jueves, 27 de septiembre de 2007

Actual ofensiva paramilitar contra zapatistas

Ofensiva contra zonas zapatistas
Blanche Petrich

En los nueve meses de gobierno de Felipe Calderón, los territorios indígenas de Chiapas, y en particular las zonas donde se han implantado las juntas de buen gobierno zapatistas, han experimentado “una ofensiva brutal” que combina una acción concertada de los 79 campamentos militares permanentes instalados en el estado con las autoridades locales priístas, instituciones agrarias y grupos paramilitares que se cobijan bajo siglas de organizaciones campesinas. Según un detallado estudio de campo, “que rastreó cañada por cañada, caracol por caracol, todos los municipios autónomos”, realizado por brigadas de observación de las bases zapatistas y del Centro de Análisis Político e Investigaciones Sociales y Económicas (CAPISE), miles de familias corren peligro de ser despojadas de sus tierras y pertenencias en el corto plazo. Los desalojos comprenden 10 mil 544 hectáreas y están previamente amparados por fallos irregulares emitidos por el Tribunal Unitario Agrario, siempre en favor de los grupos campesinos que cobijan bajo sus siglas a conocidos líderes paramilitares.
CAPISE enlista 13 comunidades de alto riesgo. Dos secciones del ejido Mukulum y ocho pueblos de Agua Azul, municipio Chilón; Ranchería El Nance, Altamirano; comunidad 24 de Diciembre, municipio Margaritas; San Juan del Río, San Alfredo, Casa Blanca, Miguel Hidalgo, 20 de febrero, Nuevo Rosario, municipio autónomo La Garrucha (Ocosingo), Nueva Revolución y San Patricio, municipio Roberto Barrios.
“Es –indicó Ernesto Ledesma, director del CAPISE– la mayor embestida que se ha visto en los últimos nueve años”, parecida a las cruentas etapas de los gobiernos de Absalón Castellanos y Roberto Albores. Tendrá como consecuencia un despojo de tierras “masivo, sistemático y legalizado a priori”, alertó. El más reciente trabajo de este equipo investigador, que trabaja en el área desde hace cinco años, fue presentado ayer aquí en conferencia de prensa. Ilustra cómo la diseminación de 79 campamentos militares, incluyendo al menos cuatro unidades de Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales (Gafes), han consolidado la militarización y la aplicación de una política contrainsurgente en el estado.
“La recomposición de la Secretaría de la Defensa en Chiapas –explicó el investigador– da la apariencia de una gradual salida de tropas de la región, pero lo que ocurre es exactamente lo contrario: salió cantidad de tropa y entró calidad castrense con el objetivo claro de desmantelar los municipios autónomos operando bajo la cobertura articulada de la procuraduría, la Secretaría de Reforma Agraria, el Congreso de la Unión, las secretarías de Comunicaciones y Transportes y Gobernación y el gobierno de Juan Sabines”.
El despliegue de unidades de “calidad castrense” en campamentos aledaños a zonas donde se encuentra la retaguardia del EZLN –como son las cañadas de La Garrucha (La Sultana), Las Tacitas y Taniperlas– incluye no solamente a las brigadas de infantería sino a otras unidades de elite, como Gafes y agrupamientos de Fuerzas de Tarea y Fuerzas de Intervención Rápida (FIR), que tienen equipamiento y capacidad para realizar operaciones “de alto impacto” contra “terrorismo y grupos armados”, según documentos de Sedena.
Ledesma señaló que la suspensión de la segunda etapa de la otra campaña, que debía ocurrir en los próximos tres meses (de octubre a diciembre), “obedece a esta realidad”, ya que la ofensiva descrita en el documento La embestida del Estado mexicano contra los pueblos indígenas y sus territorios sigue considerando al EZLN como el “enemigo interno” y pretende desarticular el tejido de comunidades que han logrado una representatividad política y social en torno a las juntas de buen gobierno. “Este despliegue contrainsurgente en Chiapas no corresponde a una lucha contra el EPR sino contra el EZLN y sus bases civiles”, afirmó Ledesma. Aseguró que la ofensiva tiene que ver con la eficacia que ha logrado el funcionamiento de los caracoles y las JBG, al grado de construir en la región un gobierno alternativo que gestiona demandas y necesidades, actúa como interlocutor a todos los niveles e incluso es reconocido por poblaciones no zapatistas como una instancia para dirimir conflictos, ya que actúa conforme a usos y costumbres y para el interés comunitario. “Para gran número de comunidades que no militan directamente en las estructuras zapatistas, asumirse como base de apoyo zapatista es la única cobertura con la que cuentan”, indicó.
El estudio, integrado con los reportes sistematizados de las Brigadas de Observación Tierra y Territorio, documenta centenares de despojos, golpes, amenazas, incendios de casas, bloqueos de caminos, tala de bosques, destrucción de bienes colectivos, portación ilegal de armas y casos de privación de la libertad por parte de quienes pertenecen a grupos que, como la OPDDIC, cuentan entre sus dirigentes a conocidos paramilitares.

Mayor presencia militar en las zonas en “disputa”

Despojos a zapatistas, eje de la contrainsurgencia
El Ejército reagrupó sus unidades en el territorio indígena de Chiapas en los dos pasados años, desplegando fuerzas especiales en la modalidad de agrupamientos o grandes unidades en todas las cañadas y regiones donde existe conflictividad entre comunidades zapatistas y poblados controlados por grupos de la Organización para la Defensa de los Derechos Indígenas y Campesinos (Opddic), la Asociación Rural de Interés Colectivo (ARIC) y la Unión de Uniones, de filiación priísta o perredista, que en los últimos años han encabezado el hostigamiento contra los municipios autónomos y las juntas de buen gobierno.
La consecuencia de esta reorganización, detectada por el Centro de Análisis Político e Investigaciones Sociales y Económicas (CAPISE) en un estudio de campo, es que al plan constrainsurgente vigente desde hace 13 años se ha sumado una estrategia de despojo de tierras contra las bases de apoyo zapatistas en las zonas de la Selva, las Cañadas, los Altos y el norte del estado. En este nuevo accionar se ha incorporado un factor que no se había observado anteriormente, explica el director del CAPISE, Ernesto Ledesma: “Hay una articulación flagrante entre el Ejército federal, la Secretaría de la Reforma Agraria, la Procuraduría Agraria y los grupos campesinos hostiles al zapatismo”. El objetivo principal, concluye la investigación, es quitar a las comunidades que surgieron del levantamiento rebelde de 1994 todas las tierras recuperadas en el periodo inmediatamente posterior al levantamiento de ese año.
La más reciente investigación del CAPISE, elaborada por brigadas de observación de los pobladores zapatistas y los miembros del centro de análisis, logró levantar un mapa de la zona, en el cual se aprecia con claridad que justamente en las zonas donde hay mayor tensión entre comunidades priístas y zapatistas, siempre por conflictos de tierras recuperadas que los grupos hostiles a los rebeldes pretenden apropiarse, siempre hay una, dos y hasta tres posiciones militares. En todos los casos se trata de fuerzas especiales o cuarteles que alojan dos brigadas de infantería.
Este despliegue fue observado, por ejemplo, en Taniperla, que es el pueblo donde se formó la Opddic bajo la dirección de Pedro Chulín, identificado desde hace años como cabeza de un grupo paramilitar, ex diputado priísta, aliado del ex gobernador Roberto Albores en la destrucción del primer intento de municipio autónomo que se hizo en ese lugar. En este caso, la brigada militar se alberga dentro de la propia comunidad.
El mismo despliegue de unidades de elite se observó en San Caralampio, las cañadas de Las Tacitas y La Garrucha, y en la cañada tojolabal. Salvo las brigadas de infantería desplegadas en El Edén y Altamirano, en todos los demás cuarteles se ubican agrupaciones (dos brigadas) o grupos aeromóviles de fuerzas especiales.
“A partir del contacto y la convivencia de las comunidades con la tropa de las unidades especiales detectamos un ritmo muy acelerado de descomposición social. A diferencia de lo que hacen las brigadas convencionales, que instalan prostíbulos con sexoservidoras que llevan de las ciudades cercanas, en estos poblados desarrollan los servicios de prostitución con población local. También se observó que en cada uno de los poblados que se relacionan con los cuarteles en un lapso de uno o dos años se agudizaron las agresiones contra las poblaciones zapatistas. Los grupos afines al PRI o al PRD presionan para desalojar de las comunidades a las bases rebeldes”.
Los investigadores han recolectado información que les permite describir toda una batería de métodos para conseguir el despojo de tierras recuperadas, que incluye robo de cosechas y leña, amenazas, incendios de casas, cierres de caminos, talas de bosque, destrucción de haberes colectivos, portación de armas y, en algunas ocasiones, retención de la libertad de bases zapatistas.
En cada uno de los conflictos se ha definido un mismo patrón de la agresión. A la fecha, el Tribunal Unitario Agrario tiene centenares de casos de diferendos por resolver, en su mayoría demandas de la Opddic, que reclama como propias tierras de los zapatistas. Cuando la Procuraduría Agraria envía a sus visitadores o a notarios, por lo general éstos avalan asambleas irregulares. Y cuando la crisis amenaza con desencadenar hechos violentos, se hacen presentes patrullas de Seguridad Pública estatal o municipal que apoyan incondicionalmente a los grupos hostiles, dejando indefensos a los que pertenecen a las bases de apoyo zapatista. En los accesos a los pueblos –o incluso dentro de ellos– están a la espera las tropas especiales del Ejército, que mantienen abierta relación con los líderes agresores. “La complicidad es flagrante”, afirma Ledesma.
Con el despliegue de 29 campamentos de la 39 Zona Militar en la Selva y el norte del estado y otros 23 de la 31 zona en las Cañadas y los Altos, que incluye al menos cuatro GAFES, seis compañías de infantería no encuadradas (CINE) y un batallón de comunicaciones especiales que depende, no de la Región Militar VII –que corresponde a Chiapas–, sino directamente del Campo Militar número uno, en la Ciudad de México, “puede entenderse que este despliegue militar “de alto impacto para operar contra el narcotráfico, el crimen organizado, grupos armados o terrorismo, como se asienta en los manuales de la Secretaría de la Defensa Nacional, está listo para acatar una orden y entrar en acción”, indica el director de CAPISE.
Interrogado sobre si se trata de un escenario para entrar en acción no sólo contra las bases zapatistas, sino también contra el EZLN, aclara: “Desde el punto de vista táctico está listo. Eso no quiere decir que vaya a atacar. Solamente que puede hacerlo en cualquier momento”.

miércoles, 19 de septiembre de 2007

Comunicado del EZLN, 16 de Septiembre 2007

COMUNICADO DEL COMITÉ CLANDESTINO REVOLUCIONARIO INDÍGENA-COMANDANCIA GENERAL DEL EJÉRCITO ZAPATISTA DE LIBERACIÓN NACIONAL.
MÉXICO.

16 DE SEPTIEMBRE DEL 2007.

AL PUEBLO DE MÉXICO:

A L@S ADHERENTES A LA SEXTA DECLARACIÓN Y A LA OTRA CAMPAÑA:

HERMANAS Y HERMANOS:

COMPAÑEROS Y COMPAÑERAS:


EN ESTE NUEVO ANIVERSARIO DEL INICIO DE LA LUCHA POR LA PRIMERA INDEPENDENCIA DE MÉXICO, EL EZLN COMUNICA LO SIGUIENTE:


SOBRE EL ENCUENTRO DE PUEBLOS INDIOS DE AMÉRICA:

PRIMERO.- UNA DELEGACIÓN DE LA DIRECCIÓN ZAPATISTA, COMPUESTA POR TRES COMANDANTAS, TRES COMANDANTES Y UN SUBCOMANDANTE, ASISTIRÁ AL ENCUENTRO DE LOS PUEBLOS INDIOS DE AMÉRICA A CELEBRARSE EN TERRITORIO DE LA TRIBU YAQUI, EN VICAM, SONORA, MÉXICO, LOS DÍAS 11, 12, 13 Y 14 DE OCTUBRE DEL 2007.

SEGUNDO.- ÉSTA Y OTRAS DELEGACIONES DE LA DIRECCIÓN ZAPATISTA ASISTIRÁN, EN LO POSIBLE, A LAS REUNIONES PREPARATORIAS DEL ENCUENTRO, MISMAS QUE SE CELEBRARÁN EN LOS SIGUIENTES LUGARES:

OAXACA, OAXACA, MÉXICO. 4 y 5 DE OCTUBRE DEL 2007.

SAN PEDRO ATLAPULCO, ESTADO DE MÉXICO. 6 y 7 DE OCTUBRE DE 2007.

NURÍO, TERRITORIO PURÉPECHA, MICHOACÁN, MÉXICO. 7 y 8 DE OCTUBRE DE 2007.

RANCHO EL PEÑASCO, TERRITORIO DE LA NACIÓN TOHONO OD´HAM, MAGDALENA DE KINO, SONORA, MÉXICO, LOS DÍAS 8 Y 9 DE OCTUBRE DEL 2007.

TERCERO.- LES RECORDAMOS A TOD@S L@S ADHERENTES A LA SEXTA DECLARACIÓN, EN LO NACIONAL Y LO INTERNACIONAL, QUE ESTÁN INVITAD@S Y QUE, SI PIENSAN ASISTIR, SE REGISTREN EN LA PÁGINA ELECTRÓNICA DE LA COMISIÓN SEXTA DEL EZLN. LO MISMO LES PEDIMOS A LAS PERSONAS QUE HAN SIDO INVITADAS POR LA COMISIÓN ORGANIZADORA.


SOBRE LA SEGUNDA ETAPA DE LA OTRA CAMPAÑA EN LAS ZONAS CENTRO Y SUR DE MÉXICO.

PRIMERO.- PARA CUMPLIR CON LOS TRABAJOS DE LA COMISIÓN SEXTA DEL EZLN EN ESTA SEGUNDA ETAPA, EN LA ZONAS CENTRO Y SUR DE NUESTRO PAÍS, UNA DELEGACIÓN DE 24 COMANDANTES Y COMANDANTAS DE LA DIRECCIÓN ZAPATISTA SALDRÁ DE LA CIUDAD DE SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, CHIAPAS, EL DÍA 26 DE SEPTIEMBRE DEL 2007, PARA TRASLADARSE A LA CIUDAD DE MÉXICO.

AHÍ LA DELEGACIÓN SE ORGANIZARÁ EN 8 GRUPOS QUE VISITARÁN A L@S ADHERENTES EN LOS ESTADOS DE NAYARIT, JALISCO, COLIMA, MICHOACÁN, GUERRERO, MORELOS, GUANAJUATO, QUERÉTARO, HIDALGO, LA HUASTECA, PUEBLA, TLAXCALA, VERACRUZ, OAXACA, CHIAPAS, QUINTANA ROO, YUCATÁN, CAMPECHE, TABASCO, EL ESTADO DE MÉXICO Y EL DISTRITO FEDERAL.

LAS VISITAS SE REALIZARÁN EN LOS MESES DE OCTUBRE, NOVIEMBRE Y DICIEMBRE DEL 2007 EN CALENDARIO DETALLADO QUE SE DARÁ A CONOCER EN SU OPORTUNIDAD.

SEGUNDO.- COMO SE RECORDARÁ, EL OBJETIVO DE ESTA SEGUNDA ETAPA ES REALIZAR UN PRIMER ESBOZO DEL PROGRAMA NACIONAL DE LUCHA. POR ESTA RAZÓN, LOS GRUPOS DE LA COMISIÓN SEXTA DEL EZLN SE CONCENTRARÁN ESPECIALMENTE EN LAS REUNIONES CON ADHERENTES EN LOS DISTINTOS PUNTOS GEOGRÁFICOS DEL CENTRO Y SUR DE NUESTRO PAÍS.

TERCERO.- SI EN LA PRIMERA ETAPA EL OBJETIVO FUE CONOCERNOS Y, POR LO TANTO, EL “ESTO SOY Y AQUÍ ESTOY” FUERON LAS PALABRAS MÁS IMPORTANTES, AHORA LO PRIMORDIAL ES SABER CÓMO VEMOS EL MUNDO Y NUESTRO PAÍS, Y CUÁLES SON LAS DEMANDAS (“¿QUÉ QUEREMOS?”) QUE TENEMOS O QUE HEMOS DETECTADO A NIVEL NACIONAL, REGIONAL Y LOCAL.

CUARTO.- POR LO MISMO, PEDIMOS RESPETUOSAMENTE A LAS DIFERENTES UNIDADES ORGANIZATIVAS DE TRABAJO DE LA OTRA EN LOS ESTADOS, REGIONES, SUBREGIONES Y LOCALIDADES, QUE LA ORGANIZACIÓN DE LA VISITA DE LA COMISIÓN SEXTA A SUS LUGARES CONTEMPLE EXCLUSIVAMENTE LAS REUNIONES NECESARIAS PARA ESCUCHAR LAS DEMANDAS QUE PLANTEEN L@S ADHERENTES Y SIMPATIZANTES.

QUINTO.- CON EL FIN DE AVANZAR EN EL ESBOZO DEL PROGRAMA NACIONAL DE LUCHA, UN EQUIPO DE APOYO ACOMPAÑARÁ A CADA GRUPO DE LA COMISIÓN SEXTA, Y SE ENCARGARÁ DE GRABAR Y HACER RELATORÍAS DE LAS REUNIONES QUE SE TENGAN.

SEXTO.- TAMBIÉN PEDIMOS RESPETUOSAMENTE A L@S ADHERENTES SU APOYO PARA EL HOSPEDAJE Y ALIMENTACIÓN DEL GRUPO Y EQUIPO DE APOYO QUE LOS VISITEN, ASÍ COMO APOYO PARA GASOLINA DE LOS VEHÍCULOS EN QUE SE TRASLADEN.

SÉPTIMO.- COMO ES DEL CONOCIMIENTO PÚBLICO, NUESTROS PUEBLOS ESTÁN SUFRIENDO UNA NUEVA EMBESTIDA DE LOS GOBIERNOS FEDERAL Y ESTATAL (DE EXTRACCIÓN PANISTA Y PERREDISTA, RESPECTIVAMENTE), POR LO QUE PUDIERA SER QUE CANCELÁRAMOS ESTA SALIDA Y TOMÁRAMOS NUEVAS MEDIDAS.

¡LIBERTAD Y JUSTICIA PARA ATENCO!
¡LIBERTAD Y JUSTICIA PARA OAXACA!

Desde las montañas del Sureste Mexicano.

Subcomandante Insurgente Marcos.
México, Septiembre del 2007.

sábado, 1 de septiembre de 2007

Reseña del Intergalactico en Territorio Zapatista

Caracoles zapatistas: 13 años de lucha, 13 sueños de pie

Eugenia Gutiérrez

Tendrían que haber muerto. En el futuro que les había diseñado el Banco Mundial, ése era su destino. Un porcentaje altísimo debió haber padecido diarrea, fiebres, tristeza crónica y todo tipo de enfermedades curables. Muchos debieron esfumarse en el olvido antes de cumplir cinco años. Muchas tendrían que haber transpirado desnutrición por el resto de sus vidas. Ése era su destino. Pero sus abuelos y sus abuelas, sus padres y sus madres, tenían otros planes y el 1 de enero de 1994 los echaron a andar.

Se trata de la generación zapatista del siglo XXI, jóvenes y "jóvenas" (dicen ellas) que no saben lo que es ser golpeados por un patrón, ni explotados por un terrateniente, ni violadas por un finquero, ni intercambiadas como mercancía por un mayordomo, ni humillados por un capataz. Hombres y mujeres que, pequeñitos, caminaban al filo de la muerte pero se negaron a ser estadística cuando sus familias y sus pueblos le declararon la guerra al mal gobierno, al pésimo gobierno de Carlos Salinas de Gortari.

Claro que han tenido una infancia difícil, de trabajo y esfuerzo, de desplazamientos forzosos, persecución y acoso militar. Pero ponen mucha atención y abren bien los ojos al oír hablar de "aquellos tiempos", de ese pasado tan remoto y aterrador cuando, según explica la compañera Clara Luz, "lo más doloroso" era vivir "con el patrón en la finca", atenderlo a él, ser tratadas como animales, morirse en el parto, lavar la ropa con una fruta, moler la masa con piedra y "aparte de ser tan pobres", también sufrir "la humillación y el maltrato de sus maridos y sus padres" por culpa del alcohol, porque "la vida de las mujeres antes de 1994 era muy triste".

El Segundo Encuentro de los Pueblos Zapatistas con los Pueblos del Mundo, realizado del 20 al 29 de julio de 2007 en Oventic, Morelia y La Realidad, ha reunido a miles de personas para escuchar los reportes de avances, logros y pendientes de los cinco caracoles que trabajan como tales desde agosto de 2003. Tras apenas cuatro años de actividades se rinde un informe de resultados y de "todo lo que falta". El informe es muy extenso. Los tres caracoles sede -junto con los de La Garrucha y Roberto Barrios- presentan sus ponencias en plenarias con decenas y decenas de zapatistas sobre el templete. No hay mesas simultáneas. Las sesiones son de corrido. Se organizan las plenarias en ocho temas por cada caracol:

1) Salud (a cargo de promotores y promotoras de salud)
2) Educación (a cargo de promotores y promotoras de educación)
3) Organización de las comunidades (a cargo de comisariados, comisariadas y agentes municipales)
4) Trabajo colectivo (a cargo de los colectivos y las directivas locales, regionales, municipales y de zona)
5) La lucha de las mujeres (a cargo de bases de apoyo)
6) Autonomía (a cargo de autoridades autónomas)
7) Buen gobierno (a cargo de integrantes de las Juntas de Buen Gobierno)
8) Balance del proceso de construcción de la autonomía (a cargo de integrantes del CCRI)

Es decir que se llevan a cabo cuarenta mesas plenarias consecutivas, con dos días de pausa para traslados. Los datos son abundantes y cualquiera que los presenta tiene motivos de sobra para sentirse orgulloso. Después de escuchar el reporte de los cinco caracoles sobre los distintos temas es notoria la diferencia entre los malos gobiernos, obsesionados con el individualismo y el lucro personal, y las prácticas autónomas y colectivas.


1) Salud.

La combinación de bata blanca y pasamontañas es extraña, interesante, novedosa. Así se visten los que reportan en La Realidad. De lo informado en todos los caracoles queda claro que la salud es básica para la autonomía; que tiene un vínculo fuerte con la educación porque depende de que las niñas y los niños están bien educados; que aquí no hay médico ni médica sino promotor de salud que "no atiende la enfermedad; atiende la persona"; que en estas clínicas "lo importante es el amor. Que el paciente le duele, también nosotros nos duele".

La información puede ser tan detallada como la que brinda el compañero Roel cuando explica que se han fabricado "3,411 pomadas, jarabes" y otras preparaciones que se basan en el conocimiento herbolario de sus antepasados. O la que nos da el compa Francisco, coordinador del Hospital Técnico de Laboratorio de Análisis Clínicos "La Primera Esperanza del Rostro de Pedro", donde se han realizado 9 jornadas quirúrgicas con 53 operaciones de pacientes.

En todos los caracoles se explican los avances en planificación familiar y prevención de enfermedades de transmisión sexual y se presentan en cascada los resultados del trabajo de hueseros, parteras y promotores de salud mental que, afirman ellos, "nos está sirviendo para atender el alma y la mente de nuestras bases de apoyo". Todas y todos reconocen que, a pesar de los avances, no hay suficientes recursos "para darle más mejoramiento" a los pueblos, pues todavía hay desnutrición, falta agua potable y es necesario ampliar el sistema de vacunación. Pero quienes conocieron estas comunidades hace más de una década saben que las condiciones sanitarias y de higiene para sus habitantes han mejorado sustancialmente.


2) Educación.

Las comunidades zapatistas practican una educación que exalta "los valores del ser, no del tener", que fomenta el "amor al conocimiento" y no es ajena a la lucha de los pueblos por mejorar sus condiciones de vida. "Educación verdadera", la llaman en todos los caracoles. Con ella, afirman estar cumpliendo una parte de lo firmado en San Andrés Sakamchén (en 1996) con el mal gobierno federal, cuyas escuelas educan con miedo. Aquí, afirman promotores y promotoras, no se educa con miedo porque "el miedo es la negación de la democracia. La democracia es la hija de la libertad y su sobrino es la justicia". Y aquí se enseña la democracia y la justicia. No el miedo.

Las materias básicas son lenguas, matemáticas, historia, vida y medio ambiente y, por último, integración, donde se junta el conocimiento de las cuatro áreas. Y como "la revolución es una escuela para la vida", quienes estudiaron en la primera y segunda generaciones hoy son promotores y promotoras de educación. También son autoridades, o reporteros y reporteras autónomas que dan vida a Radio Insurgente, la voz de los sin voz, y de otra radio que pronto saldrá al aire.

Esta otra educación valora lo que las sociedades neoliberales desechan. Aquí hay encuentros de ancianas y ancianos, de niñas y niños. Se califica a los estudiantes pero nadie reprueba. Ningún estudiante parece interesado en inflamar su cerebro hasta saturarlo de datos para cotizarse mejor en un mercado. Los alumnos y las alumnas de las escuelas autónomas zapatistas "son los futuros continuadores de la lucha". Nos hablan de los CCETAZ (siglas para Centro Cultural de Educación Tecnológica Autónoma Zapatista) y nos anuncian lo que sigue, lo que seguramente viene porque ya lo soñaron: la Universidad. Esta educación autónoma que busca "la acción transformadora de la sociedad" desde lo colectivo ya está mirando el horizonte donde se impartan ciencias y humanidades. Nos lo está avisando un muchacho que asegura: "Soñamos de algún día tener una universidad totalmente autónoma... Y no daremos ni un paso atrás".


3) Organización de las comunidades.

Comisariadas, comisariados y agentes municipales nos hablan del pasado: "nuestros ancianos y ancianas" cuentan que "en aquellos tiempos", cuando el gobierno oficial los tenía controlados, "sufrieron bastante para vivir en esta tierra" porque eran como esclavos. Y "por estos trabajos forzados, por esta esclavitud, algunos lloraron". Pero "pasaron los años, pasaron los días" y llegó el ¡Ya Basta!, y llegó el '94, y las tierras fueron recuperadas y se ejerció el derecho a la tierra. El compañero Franco aclara: "No la quitamos las tierras. Las recuperamos" porque, como bien decían los primeros zapatistas, los de hace cien años, la tierra debe ser de quienes la trabajan. Y hoy, aquí, es colectiva.

En cuanto a impartición de la otra justicia hay muchas preguntas del público al final de las sesiones. Para delitos graves, se aplica el reglamento. En las sanciones, no se maneja dinero sino castigos de trabajo colectivo en beneficio del pueblo. La gravedad del castigo depende de la gravedad del delito y de la circunstancia. Las autoridades explican que, en realidad, fungen como mediadoras y consejeras para que las partes involucradas en el problema "hagan la justicia". Y luego aclaran: "No hacemos tortura ni negociamos con dinero", "no favorecemos a nadie". A pregunta expresa de cómo se castiga la borrachera, una agente municipal nos dice: la primera vez, con 24 horas de cárcel y 2 días de trabajo. La segunda vez, 24 horas de cárcel y 4 días de trabajo. La tercera vez, 24 horas de cárcel y 6 días de trabajo. La cuarta vez ya se le cita en el municipio. Lo mismo con intentos de violación, robos y otros delitos graves. Una compañera encargada de la Comisión de Honor y Justicia resume el sentir de todas las mesas: "Ahí estamos aprendiendo también nosotros cómo se hace la justicia".


4) Trabajo colectivo.

Entre las mujeres hay colectivo de pan "para algunas fiestecitas", colectivo de velas para el día de muertos y otras celebraciones, colectivo de frijol donde todas cortan la semilla y reparten parejo porque "nadie le va a tocar más; nadie le va a tocar menos". Hay también colectivos de pollos, de gallinas, de borregos, de hortalizas, de artesanías. Según explica Isabel, base de apoyo y coordinadora de trabajos colectivos, a veces las autoridades no tienen dinero y hay que aportar. Además, estos trabajos son ejemplo para sus hijos, para sus "futuros", para que no digan que ellas no sirvieron para nada.

Los compañeros explican a detalle las bases del otro comercio. Se usan abonos orgánicos, bioinsecticidas naturales. El café ya es totalmente orgánico. El trabajo colectivo de la zona norte presenta su informe de toneladas cosechadas este año: 100 de maíz, 24 de frijol, 88 de café, 14 de plátano, 1 de chile. Además, hay 1,800 cabezas de ganado. Pero los problemas continúan porque "el mal gobierno no nos deja exportar nuestros productos. Nos acapara".

Una grata sorpresa para todas y todos los asistentes es el transporte vehicular autónomo que "ya no depende del mal gobierno". El traslado de un caracol a otro se realiza en varios camiones de redilas manejados y administrados por zapatistas. En el trayecto hacia La Realidad, los mototaxis que tanta presión están recibiendo de parte de los adinerados se exhiben orgullosos en Las Margaritas. Sus logros responden a un trabajo colectivo y organizado donde, como ellos mismos afirman, "nos dirigimos solos; nos gobernamos solos; vivimos en libertad".


5) Lucha de las mujeres.

Las mujeres en Morelia abren la mesa entonando una canción que nos unifica y exhorta a luchar juntas. Esmeralda narra lo que se vivía antes del '94: no tenían derecho a participar y sus familiares no querían que salieran. Decían que iban a conseguir marido. No decidían, no opinaban. En otra mesa, Yoana cuenta cómo eran humilladas las mujeres antes de 1994: "Sólo los hombres dan sus opiniones... Caminamos en la oscuridad". Las cinco mesas de mujeres coinciden en que antes del levantamiento armado no conocían sus derechos, no sabían que los tenían, nadie les había explicado cuánto valen como personas. Pero hoy que lo saben abarcan todos los ámbitos de la lucha zapatista y, apoyadas en la Ley Revolucionaria de Mujeres, presentan sus informes de trabajo no sólo en la mesa de mujeres sino en todas. Su presencia en los templetes es notoria. De por sí, entre las asistentes de varios continentes, parece haber más mujeres que hombres. Sus voces logran lo que no hemos logrado las urbanas: atravesar cada uno de los temas.

Todas nos dicen que si hace unos años el mal gobierno y el capitalismo nublaban la mente de sus compañeros y les hacían creer que no servían para nada, hoy ellas educan a sus compañeros y ocupan todos los cargos. El alcoholismo les provocaba "el más triste sufrimiento" porque además de ser golpeadas tenían que ir a recoger a sus esposos en los caminos. Las casaban por la fuerza a los 11 ó 12 años y lo peor era que, además de aguantar la violencia de sus padres y maridos, tenían que aguantar a los patrones. Pero eso y la vergüenza de hablar han quedado atrás. Orquídea reseña la historia de su lucha. Nos dice que "las mujeres demostramos el valor gracias a la compañera Comandanta Ramona que nos heredó este derecho". Explica que las zapatistas han estado a partes iguales en todas las actividades políticas, en todas las marchas, en las movilizaciones. Dice que hablaron en el Congreso de la Unión (2001) para exigir el respeto a sus derechos. Otra compañera recuerda el trabajo de Susana. Otra nos explica: "no sólo luchamos por nosotras que estamos en Chiapas, sino que vamos a luchar por todo el mundo".

Aunque todas reconocen que falta mucho, Elodia no deja lugar para la nostalgia cuando señala: "Ya no estén pensando de la vida que ya pasamos, que era tan triste... porque hemos tenido ya gran avance". Y Elsie, de la Junta de Buen Gobierno "Hacia la Esperanza", es una de las más contundentes: "gracias a nosotras las mujeres existe la humanidad. Aunque mala, pero existe".


6) Autonomía.

Una compañera que habla en su lengua es traducida por otra compañera para platicarnos cómo "sufrieron mucho sus papaces". Nos cuenta lo que padecieron las cocineras en las fincas de los patrones. Otro compañero, también en su lengua y también traducido, cuenta lo que él vivió antes del '94. Dice que, "en ese tiempo", pasaban días sin comer y agrega: vivíamos "sin zapatos. No conocíamos qué cosa es zapatos". Los patrones nunca les daban dinero. Les pagaban en especie: 3 días de trabajo por una tacita de sal, 3 días de trabajo por una penca de plátano. Se trabajaba de 5 a 5 y "era un grande sufrimiento". Sí, está hablando de hace apenas quince años, de lo que todavía hoy se vive en muchas partes de nuestro país, aunque aquí ya es pasado.

Primero fueron los españoles con la conquista, luego los terratenientes con las fincas, pero afirman quienes hablan que "la raíz de nuestros antepasados está viva", y de ahí surgió la necesidad de la autonomía. Las comisiones de tierra y territorio no permiten la tala salvaje de árboles. Protegen manantiales, ríos, arroyos. En las cinco mesas se afirma que falta mucho trabajo, pero también se sabe que no se ha recibido ni un centavo de ningún gobierno.

En cuanto a los apoyos que ha dado la sociedad civil, siempre hay una palabra amable que agradece, pero queda muy claro que de cualquier manera el zapatismo seguirá luchando. Nos lo dice un compañero: "Nosotros y nosotras, con sus apoyos y sin sus apoyos, la vamos a hacer". Flota en el ambiente la conciencia de que la autonomía es una chinga, pues "si no lo hacemos nosotros, no hay nadie que lo va a venir a hacer por nosotros".


7) Buen gobierno.

Para las Juntas de Buen Gobierno (JBG), la ley son los Acuerdos de San Andrés Sakamchén que traicionaron todos los legisladores mexicanos. En el informe de sus responsabilidades, las autoridades de los caracoles explican sus funciones. Nos dicen que si la JBG tiene una propuesta, ésta se pasa al municipio y al pueblo a ver si la aprueban, y viceversa. Su trabajo "es velar a que la autonomía funcione". A veces tienen que caminar durante horas para visitar las comunidades donde algún problema requiere su presencia. Es en esta mesa donde escuchamos reportes de agravios y amenazas de desalojo por parte de grupos paramilitares, como la que pesa sobre la comunidad 24 de Diciembre.

Hay, además, un grupo de compañeros y compañeras que vigilan el trabajo de las juntas. Es por ello que cuando alguna autoridad no hace bien su trabajo, se le enseña mejor o de plano se le sustituye. Todas las responsabilidades son colectivas. Los cargos son rotativos. No se atiende sólo a zapatistas. Aquí se hace justicia "parejo a alguien que cae en error, pobres o ricos". Cada año tienen que dar un informe de todo lo que han hecho. Las JBG se coordinan con los cientos de pueblos que hay a nivel zona y procuran que exista un equilibrio entre todos los caracoles. Sobre los requisitos para ser autoridad sólo hay que tener "conciencia, amor al pueblo, unidad, compañerismo, ser dignos y rebeldes" y no aspirar a recibir ningún salario. No se requiere ningún "título".


8) Balance del proceso de construcción de la autonomía.

El comandante Moisés, que habla con el permiso de los caídos, explica cómo se han cumplido los Acuerdos de San Andrés y asegura que, como el gobierno no cumplió, los zapatistas no necesitaron su permiso para cumplir. Luego nos exhorta a no ponernos tristes por los que murieron porque "ni la muerte destruye la idea" y "es el fruto de su trabajo que estamos viendo".

En las cinco mesas donde se realizó un balance de 13 años de lucha se señala que el mal gobierno no les dejó otro camino a estas comunidades que no fuera el de la guerra. De los sufrimientos vividos antes del '94 se asegura que "estos pueblos y estas tierras no van a olvidar". A partir del inicio de los diálogos, cada presentador coincide en que lo único que se ha obtenido de los gobiernos local y federal son mentiras, asesinatos, traiciones.

Es en este punto donde más se profundiza en lo que falta, en los problemas y los obstáculos que aún es necesario vencer. Aunque también queda muy claro que todas las áreas de trabajo están vinculadas con las 13 demandas que conocimos tras el alzamiento. Quienes venimos de grandes ciudades sabemos muy poco de compañerismo, unión, disciplina y de planes que se trazan sin la obsesión angustiante de la falta de dinero y destino. Sabemos poco de buen gobierno. Vivimos con el malo. Hace trece años oímos hablar de sueños: techo, tierra, trabajo, salud, alimentación, educación, independencia, democracia, libertad, justicia, cultura, información y paz. Aquí, las trece demandas (10 originales del zapatismo, 3 nacidas de su fusión con la sociedad civil) se consolidan y ya huelen a realidad.


Rumbo a lo que sigue

Tendrían que haber vivido. Son los caídos y las caídas a partir de 1994. Con su sangre fue recuperada la tierra. Las comunidades zapatistas les rinden homenaje permanente por medio del trabajo y la lucha pues ellas y ellos "lo vivieron mucho su sufrimiento" y gracias a ellas, gracias a ellos "estamos aquí". Además, "ellos quisieron esta vida de unidad" pero no pudieron verla porque los asesinó el mal gobierno. Es por eso que los que aún están no detienen su trabajo.

De pronto se tiene la sensación de hallarse fuera del tiempo, lejos del espacio. Se puede pasar de un tema a otro, de un caracol a otro y de un estado de ánimo a otro como si nada con la ayudadita de un clima que ha sido como amor de hombre: a ratos dulce, a ratos cruel, intempestivo siempre. En el caracol de Morelia se escuchan testimonios de lucha de compañeros y compañeras de Indonesia, Brasil, Corea, Tailandia, Canadá, India y Estados Unidos durante más de cuatro horas. Ellos también tienen sus muertos, sus muertas. Reunidos en el auditorio, centenares de zapatistas escuchan, además, un poema del compañero Patipán en Tailandés:

"cuando salga el nuevo sol, nosotros los pueblos tendremos el dominio sobre nuestras tierras". También, la hermosa voz de Kalissa que, nacida en Canadá, vive en un rancho solita con su padre y les canta a sus "Colinas de Salvación", de donde nadie podrá arrancarla. Poco después, en el mismo auditorio, suenan los nombres de "los asesinos de nuestros abuelos": Héctor Albores, Antonio Nájera, Absalón Castellanos, Catalina Paradas.

Cuando le toca el turno al caracol de Roberto Barrios se hace evidente que las presiones militares y paramilitares no cesan. Una compañera presenta la lista de denuncias de lo que han soportado a lo largo de este año: la quema de viviendas por parte de Paz y Justicia, desalojos y torturas en agosto de 2006, problemas con un predio de choles de Tumbalá, compañeros presos, la muerte el 13 de noviembre de 2006 de cinco personas en Viejo Velasco (cuatro compañeros y un atacante). Siete personas desaparecidas. Seis personas con órdenes de aprehensión: 2 bases de apoyo, 2 de Xi' Nich y 2 de Viejo Velasco. Amenazas de desalojo en Akabalná, en La Paz. La lista es grande. El auditorio escucha en silencio. La compañera termina su intervención: "que cada quien haga lo que le corresponda".

En otro momento, Ageo nos cuenta "su tiempo de historia" y señala orgulloso que hace ya 21 años que dejaron de abrir caminos reales como ordenaban los patrones, esto "gracias a los insurgentes que en 1983″ vinieron para continuar la preparación de los pueblos, en aquellos días en que "la gente era tan humilde. Era obediente. Era otra generación". Por su parte, el comandante Brus Li habla muy en serio cuando nos invita a "tomar el destino de la historia". La forma en que la organización zapatista está desmoronando los cimientos de las prácticas capitalistas de explotación y despojo en estas tierras no es ningún chiste.

Y quizá porque nos acompañan nuestros muertos y nuestras muertas, nos sentimos bien vivos. En este extraño evento ocurren cosas extrañas: en La Realidad bailamos una cumbia llamada "Los Tres Asesinos", dedicada a Vicente Fox, Enrique Peña Nieto y Ulises Ruiz, faltaba más. En la clausura de los trabajos en Morelia hacemos aeróbicos masivos bajo la dirección del comandante Zebedeo. Aquí es obvio que "reventón" y "cultura" son palabras sinónimas. En un escenario altísimo, tan alto que no alcanza a ser retratado por nuestras cámaras sin telefoto, cada noche hay obras de teatro sobre educación verdadera, problemática de género y avances en el manejo grupal del Tae Kwon Do. En cualquier lado, por las noches se proyectan películas sobre Atenco y Oaxaca en un montaje que podría parecer el Cinema Paradiso si no fuera porque recoge tanta rabia, tanto grito, tanta represión.

Una noche, el Subcomandante Marcos se presenta con varias niñas y niños que inflan globos y cargan cubetitas de agua mientras él narra el cuento de la piedra que quiso ser nube, escrito en colectivo. Por supuesto, no muy se entiende. Luego, como cada noche, viene el baile. El que ya ha sido considerado como "himno" de este Segundo Encuentro, la inolvidable tonadita de "Cama, cama, camaleón. Yo soy el Camaleón" ha sido transformada en hard punk por el Andy, el Gato y el Jorge para ser cantada como "Rebe, rebe, rebelión. Viva la rebelión". En otras palabras: parece un encuentro común entre zapatistas y sociedades civiles. Pero no lo es. El grado de compromiso adquirido al suscribir la Sexta Declaración de la Selva Lacandona hace que todo adquiera un matiz diferente. Nuestros muertos, como Alexis, también caminan por estas montañas. Nuestras compañeras violadas siguen en la cárcel mientras sus violadores están libres. Nuestras presas y nuestros presos duermen lejos de aquí.

En La Realidad, la clausura llega con la luna llena, descrita por el Sub como luz rescatada de la que se le cayó al sol. Vuelven a aparecer las muertas, los caídos, los vigilantes. El Teniente Coronel Insurgente Moisés nos recuerda nuestras responsabilidades y comenta que el Subcomandante Pedro y la Comandanta Ramona están presentes, vigilándonos, cuidando. Pensamos que sólo nos queda volver a reunirnos en Sonora, en octubre. Pero entonces Everilda nos despide y nos sorprende. Ya la habíamos escuchado en la mesa de mujeres cuando dijo: "Exigimos a todos los hombres del mundo" que nos respeten "porque un México sin mujeres no sería México, y un mundo sin mujeres tampoco sería mundo". Ahora nos invita a volver a reunirnos en el Tercer Encuentro de los Pueblos Zapatistas con los Pueblos del Mundo el próximo mes de diciembre. Sólo que, esta vez, en el encuentro sólo se escucharán voces de mujeres. Los hombres pueden asistir, claro, "pero calladitos" para apoyar en la logística. La candidata a comandanta nos informa dónde y cuándo será la cita: tentativamente, el caracol de La Garrucha. Llegada: 28 de diciembre de 2007. Tres días de trabajo (29, 30 y 31 de diciembre) y luego la conmemoración del alzamiento zapatista (1 de enero). Regreso: 2 de enero de 2008. El encuentro llevará el nombre de quien más orgullosa estará: Comandanta Ramona.

En el desierto de injusticia, miseria y abusos que es el campo en nuestra patria, estas comunidades rebeldes parecen más oasis que caracoles. Nosotras, nosotros, partimos sabiendo que aquí los sueños se cumplen con trabajo y por eso están de pie, caminando con firmeza